Tientos a Aristóteles
Esto es un intento de abordar las ideas de Aristóteles y quizás sirva a futuros lectores. Hoy, dos mil años después de su muerte, le toca a un mexicano dar sus primeras impresiones y aportar sobre los temas clave de Aristóteles.
Fundador del pensamiento occidental, discípulo de Platón y conocido como filósofo del sentido común, Aristóteles estaba limitado por las circustancias de su tiempo. Aunque muchas de sus ideas parecían bastante buenas y permanecieron sin cambio durante 25 siglos, al hallarse las ideas procreadas por el género humano en continuo progreso, podemos claramente encontrar áreas de oportunidad en su trabajo. Por ejemplo, Rusell puede criticar todo el trabajo de nuestro protagonista y concluye en su libro «Una historia de la filosofía occidental» que la mayoría de sus ideas son erróneas, excepto la teoría del silogismo, la cual considera superada. Para los neófitos de la lógica y no interesados en la filología, leer Aristóteles podría parecer una pérdida de tiempo.
En su obra magna «Órganon», Aristóteles escribio sus reflexiones sobre lógica con muchos cambios en medio, tal vez nunca podemos leer sus ideas originales y esto se debe a la naturaleza técnica del tema como a los muchos siglos de interpretación, traducciones e influencias políticas.
Lo que es claro es que a veces es más fácil entender oraciones que entender un tsunami de símbolos. Y en eso Aristóteles gana. Él fundó nuestro pensamiento occidental, vale la pena leerlo para entender desde una perspectiva más del sentido común que desde una rigurosidad que, a primera vista, parece una verborrea de ideas muy simples convertidas en montañas de artificios.
Una típica forma de expresar una sentencia formal es:
que significa para toda x cumple P(x) si y solo sí no existe una x que no esté P(x).
Sería más didáctico -aunque menos formal- con la tabla de las oposiciones: un juicio universal afirmativo se contrapone a un juicio universal negativo.
O veamos esta otra:
Un juicio universal es contradictorio a los juicios particulares porque difieren en cualidad y en cantidad.
Amicus Plato, sed magis amica veritas.